ÁNGELES DE LA GUARDA DE ARROYO DE LA LUZ
Se llaman Isabel, Izahara, Laura, Pilar, Maria Soledad, Elena, Maria, Esperanza, Gema, Marga, Marisa, Mari Angeles, Ouaffa, Rocío, Maria Angeles, Maria Felisa, Tamara, Sonia, Trinidad, Vicenta y Victoriana y son trabajadoras del Ayuntamiento arroyano. El Ayuntamiento de Arroyo de la Luz ha creado el Servicio de Proximidad local , en los 30 días que han pasado desde que se decretó el aislamiento social, no ha parado de gestionar recursos para atender a la población más vulnerable de la localidad, creando nuevos servicios públicos al reforzar su área de servicios sociales y constituyendo la Plataforma ciudadana , FuerzArroyo, para canalizar todos las muestras y ejercicios de responsabilidad de cada ciudadano, empresa o asociación del municipio, de la que ya forman parte cerca de 200 vecinos, todo ello coordinados de manera conjunta por la concejala de salud y servicios sociales y el concejal de participación ciudadana e innovación social.
Entre los servicios que se crearon figura el que se ha denominado Servicio de proximidad, un servicio atendido por las 21 auxiliares de ayuda a domicilio con los que cuenta el Ayuntamiento arroyano, que entre otras labores se han encargado de realizar día tras día un seguimiento y atención a las personas que necesitasen ayuda por diferentes motivos, y los datos de atención han sido muy buenos, 102 personas atendidas desde el pasado 13 de Marzo y 447 servicios realizados.
Entre las 102 personas atendidas se encuentran personas con movilidad reducida, solas, padeciendo enfermedades diversas, matrimonios de edad avanzada, positivos en coronavirus…, todos coincidiendo en que la red familiar de apoyo si la tienen, está fuera del pueblo, no tenían a nadie o si estaban en Arroyo debían estar aislados, situaciones que hacía que estos ciudadanos pasaran a una situación de vulnerabilidad.
Y entre los 447 servicios realizados se encuentran hacerles las compras de alimentos, ir a por medicinas a la farmacia, tirarles la basura entre otras actuaciones de la vida diaria.
Para ello el Ayuntamiento ha habilitado un número de teléfono el 689243675 al que llaman diariamente todo el que necesita algún tipo de ayuda.
Son muchas las historias personales que hay detrás de cada servicio que se presta por el Ayuntamiento como los casos de personas que viven solas en sus domicilios como Julia, Juana , y María Luisa, y saben que no pueden salir a la calle, que para ellas supone mucho riesgo hacerlo por los problemas de corazón, cáncer o diabetes que padecen. Alguna de ellas ha pasado el temido COVID19, y todas siguen a rajatabla las recomendaciones de los médicos de nuestro Centro de Salud y de las autoridades sanitarias.
Cada uno de ellos llama de dos a tres veces por semana al 689243675 para que el servicio de proximidad le acerque el pan, cuatro “cosinas” más para la comida y la cena, sacarle la basura o ir a la farmacia de La Parra, a la de Sanguino o a la de Rodrigo a por las pastillas de la “cartillina”. Saben que llamando por la mañana de lunes a viernes a ese teléfono, los Servicios Sociales del Ayuntamiento le mandarán a una auxiliar para los recados de alimentación, farmacia o basura que le pudieran surgir.
Las 21 auxiliares de ayuda a domicilio del Ayuntamiento, que se han convertido en verdaderas Ángeles de la Guarda, trabajan entre otros servicios municipales, en este de proximidad para que con todas las medidas de protección y sin contacto directo con el ciudadano, nuestros mayores y sus familias puedan tener la tranquilidad de que sus necesidades más prioritarias quedan cubiertas con total garantía y máxima prevención.
Adolfo está muy agradecido cuando le van a por el pan sin gluten para su esposa celíaca, y Mercedes, su vecina, con la que habla de puerta a puerta, se quita tener que bajar la basura. Están mentalizados de que tienen que quedarse en casa, y agradecen que el Ayuntamiento les ahorre riesgos innecesarios.
Virtudes, de 89 años, que vive sola en el pueblo y su hija en Cáceres, con el teléfono como único medio de contacto con ella, nos llamó a través de una vecina para cambiarle las pilas al teléfono y para subirle la bombona a la cocina que el repartidor le había dejado en la puerta, porque se había quedado incomunicada y no nos podía llamar, o Jacinta, de 94 años, que presume con razón de que siempre le piden el carnet porque no se creen la edad que tiene, que vive sola y tiene la familia en Madrid, y aunque se apaña para la basura con su vecino que está muy pendiente de ella, tiene apuntado con su letra y bien cerquita el teléfono de atención al ciudadano para que cuando tenga necesidad de ir al comercio o a la farmacia tenga en la puerta de casa lo que necesite.
Desde el Ayuntamiento se agradece enormemente el trabajo realizado por todo el personal que realiza su labor en este necesario servicio, 21 mujeres arroyanas, coordinado por una excelente profesional como es la trabajadora social Eva Luz Jimenez.